Mi amigo: Me harta esta ciudad, ¡Tengo que salir!
Yo: ¿Porqué? ¿De qué estás escapando?, ¿Porqué te querés ir?
Mi amigo: Escapo de un encierro, de mi encierro, ¡quiero ser libre!
Yo: Mmmmm.. ¿Ir como a donde?
Mi amigo: Talvez a Uzbekistán...
Yo: ¿Que buscás allí?
Yo: ¿Porqué?
Mi amigo: Porque es más barato, no tengo que competir con nadie, seré un extranjero exótico y las leyes de mi país me protegerán.
Podré hacer lo que quiera allá. Me conectaré a una mi nativa, le endulzaré el oido y ¡ZAZ! tendré un romance con alguien que
me alegará menos y cuando me aburra regresaré.
Este romance me abrirá los ojos y me hará apreciar lo que tengo en mi país. Patojas ariscas y cerveza barata.
Yo: ¿Por cuanto tiempo?
Mi amigo: Por el que sea novedad y las leyes extranjeras no me molesten, fumaré mucho para entender mi existencia.
Cuando regrese entenderé mi sociedad y haré mi vida con alguien de mi raza.
Yo: Mmmmm, buen viaje pues, hay nos mandas un correito y si mirás algo que me guste me lo mandás y pago yo el DHL.
Mi amigo: Orale...Voy a comprar mi boleto.